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Jo Blog!!!!

Hoy, un poco por sueño y un poco por escapar de mis primos que ya me tenían las pelotas hinchadas, desde que me rompieron un flecha jugando con mi arco, me fui a dormir… a continuación paso a relatarte el sueño que tuve.

Yo iba en un avión, el que iba aterrizando sepa dios donde. Sin motivo aparente, comencé a correr hacia la cola del avión con un poco de desesperación. Los pasillos estaban llenos de gente y los asientos igual. Era como ir en una micro…

Cuando terminé de correr, estaba frente a una puerta, la cual yo sabía que era la última de cola. Ésta puerta tenía al lado una palanca del estilo de “Emergency break”. Sin saber por que, la accioné. Bajo mis pies sentía la vibración producida por los neumáticos al rozar el suelo y escuchaba el chillido estridente, característico de la situación.

Cuando frenó, la puerta se abrió de golpe y apareció uno de esos resbalines inflables, pero de color amarillo chillón y medio transparente. Parecía de juguete… la gente empujaba hasta que me vi obligado a saltar. Lo que viene a continuación ni se lo imaginan.

Cuando bajé, miré hacia atrás, el avión ya no estaba. Solo quedaba un terraplén de aproximadamente 3 metros de altura con las ruedas del avión marcadas en el borde… se notaba que el piloto había sido muy hábil para controlar el desastre.

Cuando miré hacia el otro lado, había una jungla. Había muchísima menos gente de la que yo vi bajar del avión. Me paré en una pequeña loma que había cerca y vi que había alrededor de cinco o siete personas. Me llamó la atención un chico que tenía pinta de hardcorito (mechón sobre el ojo y vestido con colores marrón y negro). El chico saltaba y agarraba las ramas de un árbol parecido a un sauce, tomaba las ramas de bien arriba y luego se dejaba deslizar hacia abajo. Lo más raro de la escena era que el chico se dañaba. Al principio le sangraban las manos, luego se quebró la rodilla… siguió saltando. Se comenzó a sacar carne de las manos producto del roce con las ramas. En su rodilla se podía ver un hueso saliendo… y el chico de contextura delgada seguía saltando con al aparente intención de sacar la rama y haciéndose cada vez más daño. Me llamaba la atención que, teniendo la rodilla con un hueso al aire y las manos ya casi en las mismas condiciones, siguiera haciendo lo mismo. Mientras, las demás personas empezaban a hacer campamento recolectando madera y piedras (no me pregunten para que). Mientras yo miraba toda esa escena, una voz me dijo “aquí las reglas son distintas, chiquillo”… yo sabía que se refería al chico que se dañaba.

Ahora quedaban solo 4 personas. El chico que estaba saltando, dos chicas cercanas a mi edad y yo. Estábamos ahora sentados alrededor de una mesa hecha con ramas y hojas grandes… como de jungla. A mi me llamaba la atención que el chico de recién no tuviera ninguna herida. Yo estaba conciente de que habían pasado ya algunos días desde el accidente, pero aún así me extrañaba que estuviera vivo y entero. No recuerdo sobre que estábamos hablando, pero ya éramos amigos. De pronto, el mismo joven se para y sale volando. Yo estaba MUY extrañado. De nuevo la voz me dice “aquí las reglas son diferentes…”, así que me paré, me puse un jet pack y salí volando. El chico que salió primero, ahora tenía una especie de mini nave de batalla y me tiraba misiles, pero yo sabía que era un juego y yo lo estaba jugando también... era entretenido jugar a matarse a sabiendas de que no nos iba a producir ningún daño. Mi jet pack de pronto era también una mini nave de batalla, la cual manejaba acostado de guata dentro de ésta. De nuevo me habló la voz (a todo esto, era una voz femenina y muy dulce), me dijo “aquí las reglas son diferentes… todo lo que te imagines se va a hacer realidad”. Fue entonces cuando derribé al joven Hardcorito con mis misiles teledirigidos y luego, como no sabía como terminar el juego, me suicidé estrellándome contra el suelo.

Cuando volví, estaba otra vez sentado en esa mesa con mis 3 amigos (las dos niñas y el hardcorito). Había pasado ya bastante tiempo desde el accidente del avión. Tiempo que yo, me perdí. Les pregunté: “ya aprendieron a usar los poderes??” y me respondieron que si.

Ahora estábamos los cuatro en el living de mi casa y afuera había un auto modelo sedán de color blanco. Como yo sabía que lo que yo imaginara se iba a volver realidad, mirándolo desde la ventana le prendí los intermitentes. Luego los apagué de a uno y me imaginé que el auto era ahora el delorean. Abrí los ojos y ahí estaba… el delorean de volver al futuro. En uno de los sillones de mi living estaba sentada una de las niñas y partí a avisarle lo que había hecho para que lo viera y el escenario cambió bruscamente.

Esta vez estábamos en lo que era una mezcla de mi casa con otra casa que no conozco, pero en la jungla. Estaba lloviendo MUY fuerte y se caían las ramas de los árboles. De pronto, empezamos los cuatro a sentir miedo. Había una o dos personas más del accidente del avión, pero los protagonistas éramos nosotros cuatro. De repente, de una de las piezas salen las dos chicas aterradas. El hardcorito había desaparecido… lo fuimos a buscar la patio. Las ramas caían desde los árboles y ahí estaba él parado al frente de una rama que se había caído. Parecía triste… lo llevamos a su pieza. Pero cuando llegamos a ésta, él ya no estaba con nosotros. Yo sabía que era culpa mía, pues yo había imaginado que desaparecía y no me atrevía decírselo a las dos chicas… solo restaba imaginar que aparecía de nuevo para que eso pasara, y la voz me repetía a cada rato “aquí las reglas son diferentes… lo que imagines se va a volver realidad…”

Fue ahí cuando desperté. Me había quedado dormido alrededor de las 2 y eran ya las 6 y media… me quedé un buen rato pensando en el sueño y recordando todas las partes para poder escribirlo después antes de levantarme.

En fin… eso va por ahora…

See ya

Lotear_Daisuke